Hoy me visitó este pequeñín, Macroglossum stellarum dice llamarse. Volador incansable, de flor en flor, no descansa ni para libar el néctar de las flores por las que pasa, de las que puede extraer su sustancia gracias a su larga trompa que le permite recolectar mientras mantiene su constante vuelo.
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2 comentarios:
Que curioso yo logré una foto casi en las mismas fechas pero en Estambul.
Un saludo y enhorabuena por tu blog, al que acabo de votar en el apartado naturaleza.
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